BLOG

Día Internacional de la Energía Limpia 2025: mover el mundo de forma sostenible

La energía limpia tiene como objetivos proteger el planeta y no dejar a nadie atrás. Hoy te hablamos de la importancia del Día Internacional de la Energía Limpia 2025.

alt-img-energias-renovables

2024 batió varios récords mundiales. Por un lado, las primeras estimaciones apuntan a que se alcanzó el hito histórico de 530 gigavatios (GW) de nueva capacidad de energía renovable, lo que superaría los 473 GW de 2023. Sin embargo, también fue el año más caluroso jamás registrado.

En un contexto internacional voluble, países, empresas y comunidades continúan apostando por las energías renovables como el único camino para evitar la catástrofe climática y promover el desarrollo sostenible.

Pese a que todavía nos queda mucho camino por recorrer para alcanzar los objetivos de la Agenda 2023, hoy, 26 de enero, Día Internacional de la Energía Limpia, nos permitimos ser optimistas e imaginarnos un futuro libre de combustibles fósiles.

¿Qué voy a leer en este artículo?

 

De dónde viene el Día Internacional de la Energía Limpia 2025

El Día Internacional de la Energía Limpia fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas, que declaró el 26 de enero como tal (resolución A/77/327). La finalidad de este día es concienciar y movilizar hacia una transición a la energía limpia. Esta fecha fue elegida para conmemorar el aniversario de la fundación de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), reconocida por su papel de liderazgo en la aceleración de la transición hacia el uso sostenible de energía renovable.

Es importante no confundir el Día Internacional de la Energía Limpia con el Día Mundial de la Energía, que se celebra cada 14 de febrero con el objetivo de promover el acceso universal a la energía y la utilización de energía renovable.

 

¿Qué entendemos por energía limpia?

La energía limpia se refiere a cualquier fuente de energía que cause un impacto ambiental mínimo. No emiten gases de efecto invernadero durante su producción y su uso, por lo que son consideradas «limpias» en comparación con las fuentes de energía tradicionales como los combustibles fósiles.

Entre ellas, hay tanto energías renovables como energías no renovables (como es el caso de la nuclear):

  • Energía solar: se obtiene a partir de la luz del sol. Puede ser fotovoltaica o termosolar.
  • Energía eólica: se produce al convertir el viento en electricidad utilizando turbinas eólicas.
  • Energía hidroeléctrica: se genera a partir del movimiento del agua, como las corrientes de ríos o cascadas.
  • Energía geotérmica: se obtiene del calor almacenado debajo de la superficie de la tierra.
  • Energía de biomasa: se produce a partir de materia orgánica como plantas y residuos animales.
  • Energía de los océanos: incluye tanto la energía mareomotriz (generada por las mareas) como la energía de las olas (undimotriz).
  • Energía nuclear: aunque la energía nuclear puede considerarse limpia en términos de emisiones de carbono, su inclusión en esta lista puede ser controvertida debido a los residuos radiactivos que produce. En este artículo ya abordamos los impactos de la energía nuclear en el medio ambiente.

 

Por qué la energía limpia es importante para la sostenibilidad del planeta

La energía limpia es crucial para la sostenibilidad del planeta porque reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, que son los principales contribuyentes al calentamiento global.

Sin embargo, la energía renovable es aún más importante. Aunque todas las formas de energía renovable son limpias, no todas las formas de energía limpia son renovables. Por ejemplo, la energía nuclear se considera una forma de energía limpia porque no produce emisiones de gases de efecto invernadero, pero no es renovable porque depende del uranio, un recurso no renovable.

La energía renovable, por otro lado, proviene de fuentes que se regeneran naturalmente en un período de tiempo corto y no se agotan. Estas fuentes incluyen el sol, el viento, el agua , la biomasa y el calor interno de la tierra. Al aprovechar estas fuentes de energía, podemos reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles, que son finitos y tienen un impacto negativo en nuestro medio ambiente a través de la contaminación del aire y el cambio climático,además de otros riesgos posibles como la contaminación marina por fugas en el transporte

Las energías renovables permiten llevar electricidad y servicios básicos a lugares del planeta donde de otro modo sería imposible y mejorar las condiciones de vida de muchas personas. La docuserie “La luz que permanece” narra, precisamente, la aventura de un voluntario llevando energía limpia a la Amazonía peruana y el impacto positivo que generan en estas poblaciones ubicadas en lugares remotos y difíciles de acceder. Si queréis entender un poco mejor cómo puede cambiar la vida a las personas en la selva la presencia de unos pequeños paneles solares, podéis verla aquí.

Además, las energías renovables tienen otra ventaja que suele pasar desapercibida y de la que os hablamos ya en este artículo, son fácilmente reversibles al llegar al final de su vida útil.

 

 

Por qué la energía limpia es importante para las personas y la economía mundial

La conexión entre energía limpia, desarrollo socioeconómico y sostenibilidad ambiental es crucial para abordar los problemas a los que se enfrentan las comunidades vulnerables en todo el mundo:

  • Protección del medio ambiente: al no emitir gases de efecto invernadero ni durante su producción ni su uso, son claves para luchar contra el cambio climático.
  • Seguridad de suministro eléctrico: una mayor contribución de las energías renovables a la matriz de generación energética puede mejorar la seguridad del suministro eléctrico al hacer que los países sean menos dependientes de las importaciones de combustibles fósiles, que están sujetos a fluctuaciones de precios y disponibilidad.
  • Crecimiento económico y creación de empleo: las inversiones globales en tecnologías limpias alcanzaron un asombroso 50 % de aumento en 2023, sumando 235.000 millones de dólares. Este auge supone casi el 10 % del crecimiento de la inversión en toda la economía mundial y se ha concentrado mayoritariamente en la fabricación de baterías y paneles solares, que juntos captaron cuatro quintas partes de la inversión. Este dinamismo también impacta en la generación de empleo, ya que se estima que la transición energética proyectada generará 122 millones de puestos de trabajo en 2050, muchos de ellos vinculados directamente a las energías renovables.
  • Acceso universal a servicios energéticos seguros y asequibles: la energía limpia no solo contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también tiene el potencial de transformar la vida de comunidades que carecen de acceso a electricidad confiable. Actualmente, alrededor de 685 millones de personas viven sin acceso a electricidad, la mayoría en condiciones de absoluta oscuridad. Más del 80% de esta población se concentra en el África subsahariana, donde las soluciones energéticas sostenibles pueden desempeñar un papel crucial en mejorar su calidad de vida y fomentar su desarrollo. Según el informe World Energy Transitions Outlook de IRENA, la adopción de energías renovables a nivel mundial sigue evidenciando importantes disparidades según la región geográfica. Mientras que los países desarrollados concentran el 85% de la capacidad instalada, África apenas alcanza el 1,6%. Esta desigualdad fue uno de los temas más destacados durante la COP29, donde se enfatizó la necesidad de equilibrar estas brechas como parte integral de la lucha contra el cambio climático.
  • Resiliencia frente a la volatilidad de los precios: la energía renovable puede ayudar a los países a generar resiliencia frente a la volatilidad de los precios y reducir los costes de energía.

En resumen, el Día Internacional de la Energía Limpia no es simplemente una celebración, sino una llamada a la acción para gobiernos, industrias y organizaciones en todo el mundo. Este día destaca la urgencia de una transición global hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles. A medida que avanzamos, es crucial que las políticas, la innovación y la inversión se alineen para abordar un desafío común: el cambio climático. El futuro de nuestro planeta depende de nuestra capacidad para redefinir cómo generamos y usamos la energía.

 

 

Fuentes: